La trucha sigue siendo la consentida de los deportistas que se dedican al arte de la pesca. Un pez fuerte y que siempre ofrece una excelente oportunidad de hacer de una sesión de pesca una faena interesante donde probar hasta al mejor deportista.
En Guadalajara la pesca de esta especie es muy buscada, si bien sus zonas y repoblaciones no son también cuidadas como en otras provincias, lo que afecta la práctica deportiva general de la zona, sí se encuentran buenos sectores para hacerse de una excelente trucha común o arcoíris. Revisemos en esta nota dónde poder hacer una pesca divertida y abundante de esta especie tan querida por los pescadores de la península.
Dónde Pescar Truchas en Guadalajara
Río Tajo
Es el río perfecto para la pesca de truchas. A lo largo de este encontramos diversos sectores en donde poder hacer una lanzada de caña exitosa. Veamos algunos lugares recomendados:
- Ocentejo – Alto Tajo: de aguas torrentosas, los pescadores novatos y más expertos encontraran aquí un paraíso de truchas de buen tamaño. Se recomienda el uso de cucharilla y mosca ahogada como la opción de pesca de estas activas presas.
- Peralejos de las Truchas: una zona idílica donde, como su nombre lo indica, la trucha es la reina de sus aguas. Además la posibilidad del senderismo, la observación de aves y otras actividades al aire libre la ofrecen como uno de los mejores destinos para los amantes de los diversos parajes y pueblos de Guadalajara.
Otros ríos en Guadalajara posible de pesca
- Río Jarama: donde todas sus aguas en especial hasta la confluencia con el Jaramilla es perfecta para la pesca de truchas.
- Río Jaramilla: sus aguas continúan desde el anterior, siendo perfecto para hacer un seguimiento a esas truchas revoltosas que navegan sus aguas.
- Río Vallosera: su zona de pesca es desde su nacimiento hasta llegar a la cola del Embalse El Vado.
- Río Sorbe: los afluentes a ese tramo son pescables hasta la confluencia con el Barranco.
- Río Bornova: pescable desde su zona de nacimiento hasta confluir con el San Cristóbal.
- Río Dulce: pescable en casi toda su extensión. Se detiene la permisología al llegar al CM-1101.
- Río Cabrillas: la pesca en este es permitida en sus aguas pero solo hasta llegar al arroyo Pedrera en Checa.
- Río Bullones: todos sus tramos son pescables pero solo hasta su confluencia con el río Gallo.
- Río Arandilla: igual que el Bullones, pescable en todas sus zonas hasta confluir con el Gallo.
- Río Ablanquejo: perfecto para una buena pesca y justo se puede continuar al confluir con el Salado.
- Río Salado: continuación del Ablanquejo y pescable en todo su tramo.
Es importante recordar que siempre debe informarse y respetarse las épocas de veda truchera. Esto para la conservación de su población en sus épocas más sensibles.
Sin embargo en sus períodos de veda, la pesca de otras especies de anima y vale la pena estar al tanto para tener todo un período activo, tal y como merece ser realizado este deporte rey.
